(…) Se abrió la puerta de Santiago
y entró Héctor Herrera.
Se sacó un pájaro del bolsillo
y lo dejó aleteando sobre una mesa de mármol.
Se sacó otro pájaro de un ojo
y éste cruzó las cordilleras.
Luego se sacó uno más del fondo de su pecho,
y este pájaro se quedó a vivir con nosotros.
En el archivo personal de Héctor Herrera existe una vasta correspondencia que nos entrega información fundamental para ahondar en su trayectoria artística y sus vinculaciones personales y con el medio cultural. Se encuentran por ejemplo cartas de Nemesio Antúnez, Pablo Neruda, Mario Toral, Thiago de Mello, Jorge Páez Vilaró, Alicia Cáceres, Sara Costa; también de Hortensia Bussi, entre las más destacadas. En ellas es posible rastrear y reconstruir con precisión su presencia e impacto en el contexto cultural de la época, al que se suma la correspondencia con museos, galerías, bienales, ferias de artesanía, asociaciones gremiales y compradores de arte tanto en Chile como en el extranjero. Coherente con el período abarcado, existen centenares de tarjetas de Navidad y Año Nuevo, a través de las cuales se completa la red de contactos del artista.
La selección de correspondencia incluida en esta sección del archivo contiene cartas personales con familiares y amistades, y otras de interés público, ligadas directamente a su trabajo artístico. Destaca la correspondencia con su tío Raúl Sanhueza y con sus amigos Rafael Ampuero y Natalia Martins por su carácter intimista, por su frecuencia y la cantidad. En cuanto a su trabajo artístico, destacan las invitaciones a las ferias de artesanía de la Universidad Católica de Chile en Santiago y de la Universidad de Concepción en esa ciudad, entre otras convocatorias a exposiciones nacionales e internacionales.